– Según el estudio ‘Flash Eurobarómetro’ para la Dirección General de Comunicación de la Comisión Europea elaborado por Ipsos
MADRID, 19 (SERVIMEDIA)
Más de la mitad de los españoles, en concreto el 52%, se ve obligado a reducir la temperatura de su hogar para «hacer frente» al precio de la energía.
Así lo desvela el estudio ‘Flash Eurobarómetro’ elaborado por la empresa de investigación de mercados y encuestas Ipsos para la Dirección General de Comunicación de la Comisión Europea, según precisó este jueves la compañía en un comunicado en el que explicó que el fin de esta investigación era «recabar la opinión de la ciudadanía europea sobre su actitud ante la respuesta de la UE a los retos energéticos y la guerra de Ucrania» a partir de la realización de 26.337 entrevistas.
Según el estudio, son más del 80% los europeos que creen que el aumento de los precios de la energía de los últimos meses «tiene un impacto significativo» en su capacidad de compra, porcentaje que va del 75% en Suecia al 94% en Portugal, mientras que en España se sitúa en el 84%.
En este contexto, ocho de cada diez europeos se mostraron de acuerdo en que la UE «debería seguir tomando medidas» para «reducir» su «dependencia» del gas y el petróleo rusos «lo antes posible» y España (86%) se sitúa «entre los países más de acuerdo» con esta idea.
Asimismo, más de ocho de cada diez europeos están «de acuerdo» en que la UE «debe proteger infraestructuras críticas» como oleoductos y cables de internet, en que el precio de la electricidad «no debería depender del precio del gas», en que la guerra en Ucrania «hace más urgente» que los Estados miembro inviertan en energías renovables y en que «todo el mundo debería hacer un esfuerzo para reducir el consumo de energía durante las horas punta».
Por su parte, el 56% opina que las recientes subidas de precios se deben «principalmente» al comportamiento «agresivo» de Rusia y España está entre los cinco países que más de acuerdo se muestran con esta afirmación, dado que hasta un 65% de la población así lo considera.
Además, la proporción de personas que se mostraron «dispuestas a tomar medidas personales» para «mitigar» el «efecto» de la subida de los precios en su bolsillo representa el 95%.
Aproximadamente cuatro de cada diez ya utilizan o «están dispuestos» a usar «alternativas» al coche o la moto para desplazarse, como caminar, ir en bicicleta, utilizar el transporte público o compartir el coche o comprar equipos energéticamente eficientes con una «buena calificación energética», una medida, esta última, que solo estaría dispuesto a llevar a cabo uno de cada cuatro españoles.
«Las acciones más costosas o con mayor impacto en la vida personal, aunque más eficientes, son las que menos adopción muestran», según el estudio, que pone como ejemplos alternativas como añadir un mejor aislamiento en el hogar, optar por formas de energía renovables, instalar equipos para controlar y reducir su consumo de energía y coger el tren en vez del avión para los desplazamientos.