– Según el estudio ‘Perfil del Donante 2022’, de la Asociación Española de Fundraising y Kantar, casi 16 millones de personas han contribuido económicamente con alguna ONG
– La solidaridad de los españoles con las diferentes situaciones de crisis como la guerra de ucrania, el volcán de La Palma o la covid-19 han influido en el aumento
MADRID, 16 (SERVIMEDIA)
Casi cuatro de cada diez ciudadanos en España, 19,5 millones (el 39% de la población), colaboraron económicamente con alguna Entidad No Lucrativa (ENL) durante los últimos 12 meses, lo que supone que hay un millón de españoles más que en 2020 (37%) que han decidido donar a una causa social.
Así se desprende del estudio el ‘Perfil del Donante 2022’, elaborado por la Asociación Española de Fundraising (AEFr) en colaboración con Kantar y realizado sobre una muestra de 1.200 entrevistas. El 22% de los españoles que colaboran lo hacen periódicamente con una frecuencia mensual, trimestral o semestral.
Aunque ha descendido levemente el apoyo continuado a las Entidades No Lucrativas (ENL) a través de socios y donantes, respecto al último estudio (24%), han aumentado las colaboraciones puntuales, al pasar del 13% al 17%. Este crecimiento de las donaciones se debe, en parte, a la involucración con las diferentes situaciones de crisis.
De este modo, tres de cada diez ciudadanos que han colaborado con alguna ONG en 2022 lo han hecho con algunas de esas situaciones de crisis de este año: el 33% de ellos ha contribuido con donaciones para la guerra de Ucrania, el 30% con el volcán de La Palma y el 29% frente a la covid-19. Además, entre los donantes actuales, un 23% ha incrementado su colaboración con estas tres causas.
Entre los que no han colaborado nunca o bien lo han hecho hace más de un año, el 13% tendría intención de apoyar alguna de las causas de las ONG durante los próximos seis meses, casi la misma cifra que en el 2020 (14%).
El donante actual colabora con casi dos organizaciones, cifra similar a los años anteriores y 4 de cada 10 de sus donaciones son regulares (cuotas de socio, apadrinamiento…), frente a las 6 que son donaciones puntuales.
«España es un país solidario como lo demuestra que el 84% de la población haya colaborado de alguna manera con ONG o Entidades No Lucrativas durante 2022 y haya aumentado en un millón de personas las que han colaborado económicamente con ellas durante el presente año. Desde el sector de la captación de fondos tenemos que seguir haciendo pedagogía para acercar el valor que tiene el Tercer Sector para la sociedad y conectar con los más jóvenes», explicó Glòria Oliver, presidenta de la AEFr.
Desde 2018, la colaboración económica con las ONG ha aumentado un 3%, pasando del 36% al 39%, pero sigue lejos de países europeos como Reino Unido, Alemania o Francia, donde más del 50% de los ciudadanos contribuyen con alguna causa social. Y a este aumento ha coincidido durante los últimos años con la última reforma tributaria de 2014, que aumentó los niveles de deducción del 80% para donaciones individuales de hasta 150 euros.
PERFIL DEL DONANTE
La edad media del donante español es de 49 años. Donan por igual hombres y mujeres (50%) y el 66% está casado o en pareja, mientras que el 10% está soltero.
El 46% tiene hijos en el hogar y el 54% cuenta con estudios universitarios. En cuanto al nivel adquisitivo, destaca la colaboración de la clase media-alta (33%), frente al 12% que supone la media-baja y el 7% de clase alta. Respecto al perfil del donante potencial, es muy similar al del donante regular. Así, el 55% de los hombres y el 45% de las mujeres estaría dispuesto a colaborar.
Los principales motivos para la donación se mantienen en línea con años anteriores. La empatía (38%) y el sentimiento de ética y justicia son los principales (22%), aunque este último desciende respecto a 2020 (27%).
La cercanía se mantiene similar en el 16% y aumenta en cuatro puntos la notoriedad y la visibilidad de la causa (12%). La satisfacción de colaborar supone un 8% y la prescripción un 4%. Además, 7 de cada 10 donantes actuales tienen intención de seguir colaborando con la misma contribución que en 2022.
LO QUE MÁS PREOCUPA
Los colectivos que más preocupan a los españoles se mantienen con respecto a las dos últimas ediciones de este estudio (2020 y 2018): infancia (53%), mayores (49%) y enfermos (45%) y se focalizan en cubrir sus necesidades básicas (alimentación y sanidad), a través de apoyo a mayores y enfermos sin red familiar.
La discapacidad es el cuarto colectivo que más preocupa (41%), seguido por personas sin recursos (37%), víctimas de catástrofes naturales (37%) y apoyo a mujeres (36%). Disminuye en cuatro puntos la preocupación por el medio ambiente (35%).
El 68% de los donantes tienen una buena imagen de las Entidades No Lucrativas. El 90% cree que esta imagen es igual o mejor que en los últimos años, aunque la mayoría de los españoles considera que las ONG realizan una labor muy importante, esta percepción cae levemente respecto al año 2020, al pasar del 80% al 75%. La cercanía con el colectivo (29%) se mantiene como el principal motivo para colaborar y aumenta en 9 puntos (23%) la imagen, reputación y notoriedad.
JÓVENES Y ONG
El estudio también pone el foco en targets más jóvenes y en entender sus relaciones con las Organizaciones No Gubernamentales. Por una parte, existen una serie de frenos que les hace retraerse a la hora de colaborar. Frenos contextuales, como la incertidumbre, la subida de los precios y el alto coste de la vida y la crisis económica.
Por otra parte, los frenos actitudinales en los que valoran el papel de las ONG, pero se sienten lejanos a ellas. Por ello, demandan una relación más cercana que les haga sentir que su ayuda sigue siendo importante y vincularse con causas sociales y medioambientales que ayuden a afrontar los desafíos de la sociedad actual.
El estudio ha identificado también palancas para acelerar la colaboración de las ONG con los jóvenes como son la confianza y transparencia, la facilidad para colaborar, la personalización a medida o el apoyo a las causas próximas y para ello es necesario que las entidades tengan una comunicación directa para alimentar la colaboración.